¿Qué máquina de humo/niebla necesito?

Las maquinas de humo, ese «aparatejo» que se calienta y de vez en cuando escupe líquido. En muchas ocasiones el eterno olvidado, al que se le presta no demasiada atención hasta que empieza a fallar.

Hay casi tantos tipos de máquinas de humo como situaciones se nos pueden presentarse y saber elegir la correcta está en nuestra mano.

Para empezar, deberíamos distinguir entre las convencionales máquinas de humo (y sus variantes) y las más recientes máquinas de niebla. La diferencia entre éstas dos la encontramos en la manera en que se expulsa el líquido. Mientras las de humo convencional generan nubes de corta duración y alta densidad, las de niebla producen atmósferas muy homogéneas y duraderas.

Ahora bien, teniendo clara ésta clasificación inicial, podemos adentrarnos en las diferentes sub-categorías que encontramos y sus usos principales.

Máquinas de humo convencionales

Las más clásicas y comunes, su funcionamiento se basa en calentar el líquido (a base de agua) y expulsarlo a través de una pequeña boquilla. Generan espesas nubes de humo en un corto tiempo, regularemos su densidad empleando diversos líquidos.

Los líquidos que más comúnmente encontramos para éstas máquinas son los de densidad baja, media y alta.

En general están siendo reemplazadas por máquinas de niebla, aunque nos pueden ser muy útiles en espacios exteriores no cerrados por la gran cantidad de humo que expulsan, o para crear ciertos efectos como el humo de una locomotora, un incendio, etc.

En ocasiones se añade a la salida de éstas maquinas un ventilador para dispersar mejor el humo y hacerlo más ligero.

Máquinas de humo verticales

Muy parecidas a las anteriores, pero ubicando la salida del humo en la parte superior, esto es así para crear un efecto de columna de humo similar a los cañones de CO2. Por lo general éstas máquinas permiten ser colgadas para crear columnas de humo ascendentes o descendentes.

Otra característica habitual de éstas maquinas es la incorporación de un anillo de LED alrededor de la salida de humo, lo que permite teñirlo de diversos colores.

Se emplean sobre todo en espectáculos musicales como conciertos, verbenas y discotecas para simular generar columnas de humo cuando no se puede o quiere instalar un cañón de CO2.

Máquinas de humo bajo

Su funcionamiento es muy similar a las primeras que hemos visto, pero consiguiendo que el humo quede en la parte baja después de ser producido.

Existen varias técnicas para conseguir esto, una de las más comunes es hacer pasar el humo por un habitáculo que contiene hielo en su interior antes de ser expulsado.

Por su particular efecto están de moda en celebraciones como bodas y comuniones, otro uso generalizado es en teatro para crear nieblas bajas.

Máquinas de niebla Hazer

Entramos en las máquinas de niebla y empezamos con las máquinas Hazer, éstas son muy distintas al resto puesto que para generar el efecto no calientan el liquido, lo nebulizan inyectando aire mediante un compresor. Esto crea una duradera y homogénea niebla.

A diferencia del resto de máquinas, emplean líquidos especiales basados en aceites.

Suelen verse en teatros y auditorios aunque cada vez las encontramos más en festivales y conciertos. Esto es así por la forma en que crean el efecto, puesto que al ser más ligero no interrumpe tanto la visibilidad pero remarca muy bien el haz de luz de las luminarias.

Máquinas de niebla Fazer

En cuanto a generadores de niebla la otra opción que encontramos son las máquinas Fazer. El funcionamiento de éstas es similar a las de humo convencional, empleando líquidos en base agua y calentándolo mediante un calderín para generar el efecto, pero incluyendo a la salida un ventilador que lanza el humo y produce una niebla homogénea.

Si bien producen el efecto más rápidamente que sus hermanas las Fazer, éste tiende a ser menos duradero.

Igual que sus hermanas las Hazer, éstas máquinas se han popularizado mucho pudiendo verlas a día de hoy en casi cualquier espectáculo, teniendo además la ventaja de ser más silenciosas y limpias que las anteriores.